| Hoy se haría con motosierra y se despedazaría todo en un momento. Cuando esta hecho trozos pequeños se va haciendo una montaña de leña bien puesta o sea que no vayan quedando muchos huecos, y asi se forma una estructura luego lo tapamos bien con arbustos ramas pequeñas y hojarasca. Para luego cubrir con tierra, dejando de manera paralela varios salideros por los que después se prenderá el fuego y por los que saldrá el humo. Una vez que se le prende fuego se produce una combustión lenta que puede durar unos veinte días, aunque eso depende mucho de la metereología, de si llueve o hay mucha humedad. Se tomaran unas medidas de seguridad como tener a mano una cuba de agua y hacer un corta fuegos alrededor del horno Es una tradición preciosa y como tal, es una pena que se pierda. De hecho, desapareció de los montes cuando el gas butano llegó a las casas. Es una práctica sostenible, ecológica al igual que el producto resultante. Se utiliza la madera muerta, trozos de árboles enfernos, y asi se hace que el campo permanezca limpio, porque se retira toda esta basura y asi se evita que pueda servir de combustible para propagar cualquier incendio que se produjese 
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